IGLESIA DE LA CANDELARIA EN TURMERO

IGLESIA DE LA  CANDELARIA EN TURMERO

lunes, 12 de julio de 2010

COMO SE HACE UN DICTADOR

La dictadura y su dictador, se inician cuando la voz del pueblo se silencia y a la vez se convierte en la del DICTADOR, lo cual no se sabe ¿cuándo y por qué? Ocurre así, pero los grandes líderes totalitarios han usado esta dinámica perversa para encumbrarse y hacerse del dominio total de la sociedad a nombre de esa usurpación popular, tal es el caso, de nuestra supuesta revolución del Siglo XXI, cuyos rasgos más bien nos llevan a los momentos de esplendor de los dictadores militares latinoamericanos con sus diferencias, dado el ajuste a las circunstancias actuales. Al líder de este proceso lo oímos y vimos durante la polémica con el Cardenal, usar la palabra pueblo como propia y se identificó como eso, como el-pueblo cuando el profesional del espiritualismo le señalo su afición a él por el comunismo, no al pueblo. Tremenda manipulación. O sea ya el dictador no es persona individual, es masa andante, todo el pueblo en una sola voz. Sin embargo, el usurpador siempre niega la maniobra y suele mostrarse humilde y más bien a considerarse como una pieza más del cambio. Esto no es nada nuevo. El modelo tipo del dictador marxista leninista, Stalin una vez escribió esta pieza de hipocresía:
”Hablan de abnegación a mi persona. Quizás una frase que se os ha escapado. Quizás. Pero si no es un lapsus os aconsejaría con mucho gusto que os desembarazaras de ese principio de abnegación a las PERSONAS. No es digno de un bolchevique. Sed devotos de la clase obrera, de su partido de su Estado. Es necesario y está bien. Pero no confundas eso con la abnegación a las personas, “cascabel inútil”, y vacío de intereses burgueses".(Carta de un militante, agosto 1930, Stalin Obras completas tomo 13).
Sin embargo, estos consejos de moderación todos saben cómo terminaron, con un culto al dictador. Y claro es que al fin todo se traduce en decisión del líder como emanación divina y a la vez natural de las voluntades de abajo.
La verdad, MARX, la inspiración de todas estas atrocidades “revolucionarias”, no se compagina con estos dictadores cuando el mismo en vida evitaba en todas las organizaciones, desarrolladas o asesoradas por Marx como: Ligas, partidos, asociaciones internacionales, etc... No dudaba en desaparecerlas del mapa cuando sentía que obstaculizaba el motor histórico a la renovación de los dirigentes, a la formación de cuadros sobre el terreno, en una palabra a la lucha de clases de tendencias o ideas. No acepto nunca los anquilosados “dictadores” en este caso secretarios generales eternos, los borraba. El “jefe” desde el Poder en las organizaciones marxistas o en una Nación, por el contrario, se hacen eternos a través del “buen uso” del militante para dominarlo todo tal cual con unos procedimientos conocidos, el de abajo solo se reúne con la autorización de los de arriba ; las ordenes van aceleradas del nivel superior hacia el militante de base, pero si trata de una consulta de un Comité de Base van en morrocoy, además, se aplica la Ley de las Mayorías, (siempre) conocida como centralismo democrático, pero esto sería si hubiesen reuniones de esa mayoría permanentemente, pero, pasan hasta años sin hacerlo y así el buró político se convierte a su vez en resumen del pueblo en su síntesis que ordena a la vez al Comité Central y de allí al militante como orden, pero todo tiene además, una última instancia, como voz del pueblo que no es otro que el líder carismático y con este filtro no activo (Buro Político-Comité Central- Comités de base) si no en ciertos casos el “JEFE” manipula cualquier acción del pueblo y así se perpetua en el Poder con esta dinámica falsa a la luz democrática.
Por otra parte, las filas de los militantes "rasos" se compactan al estilo militar, disciplinadamente son el arma de combate y medio de defensa capaces de darlo todo por la “revolución”, pero por la otra tenemos al
burocratismo, organización pacifica destinada a desarrollar la enfermedad de la corrupción, alimentar al choropata, pero además, férrea estructura de apoyo del dictador siendo su eje de acción.
En todo esto por otra parte hay premisas para tener presente como la inefabilidad de la dirección política sumida al dictador que contra ella nunca se tiene razón. Así se llega a la conclusión que para sobrevivir y navegar entre este enredo de voluntades y opresión hay que seguirle la corriente al “jefe” y usarlo como salvavidas repitiendo las citas de su líder máximo, pero además de otros esenciales y pegados al “gran jefe” y si se es inteligente, adoptar la sintaxis y el vocabulario en todas sus partes para obtener éxito y lograr objetivos. Así se crea la gran farsa y el hombre, el único preclaro, se eterniza con estos mecanismos nada fáciles de romper luego de tejidos. Así si son las cosas.
TONY RIVERA CHAVEZ 2923879 noskagamus2010@gmail.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario